Derecho a la ocupación del poder
#FORMULAR
#REPRESENTAR
#DECIDIR
Ocupar y pautar la política nacional
Derecho a legislar
El asesinato de la concejala Marielle Franco, el 14 de marzo de 2018 en Rio de Janeiro, fue citado en diversos momentos como atentado político, un ataque a la ocupación de los cuerpos políticos femeninos, negros y periféricos en los espacios de decisión. Eso generó, una vez más, el sentimiento de impotencia con relación a los cambios necesarios en la sociedad. Estructuras patriarcales, racistas y sexistas eran el foco de Marielle, que hoy es símbolo de esas luchas.
«Ah, mortalidad», que mortalidad, ¡eso es genocidio! Diseñado, articulado, planeado…conceptuado y ejecutado. Esa es la gran cuestión que vivimos en el país hoy… la política es fundamental, hacer política, ocupar espacios es fundamental. Tanto es que la muerte de Marielle viene a poner eso, aquí no es el lugar de ustedes… no puede ser, hasta fueron a la red social, con foto de ella, ensuciarla encima del asesinato de una mujer negra, lésbica… Esa es mi preocupación con el futuro. Es la preocupación de que si nosotros no damos un ¡basta!, ahí si corremos riesgo de no existir, porque la maldad es muy fácil, ellos tienen las armas, tienen el estatus».
Celinha, Belo Horizonte
El poder institucional es un espacio que todavía deber ser ocupado por las periferias, sus líderes y sus pautas. Hoy la política brasileña está formada por una clase de señores de mediana edad, blancos y, en gran parte, hombres. Los mandatos se renuevan y la misma clase política permanece en los poderes. Los partidos poco innovan para incluir diversidad y las reglas del juego de las elecciones solo valen para quien tiene mucho dinero.
Los laboratorios de derecho a la ocupación del poder son aquellos que intentan, en la línea de frente, perforar la burbuja institucional y garantizar la presencia de la población periférica en el poder, ya que es la mayoría de la población. En esa búsqueda, el hacedor refuerza sus potencias, al mismo tiempo que encuentra numerosas dificultades para ponerse en par de igualdad para disputar y acceder al derecho a legislar.
Urgencia en ocupar y pautar la política
A partir de la visión de esos liderazgos es posible crear caminos de poder para las periferias, ampliando el eco de la realidad y de las demandas. Los procesos para la ocupación de ese poder, traen abordajes diferentes y poco negociables.
Diálogo y reconocimiento de pares para el fortalecimiento de causas
«La política también es el arte de poder resolver los problemas de los extremos, tiene que dialogar, es el mecanismo que encontramos, porque si no iríamos a la guerra, ¿no es así?»
Rose, Belo Horizonte
«Está también la importancia de la reciprocidad en cuestión de la movilización social. Si partimos de un punto, de movilización social comunitaria, de la comunicación popular dentro del lenguaje, discurso, narrativa, nosotros también nos comprometemos en otras luchas de la ciudad para tener ese retorno y el fortalecimiento de esa red. Nosotros no estamos solo accionando la red. Es una red que se retroalimenta por medio de la colaboración».
Vanessa, Belo Horizonte
El Cuerpo Político y la fuerza de la presencia colectiva
Formar frentes que naturalmente se identifican es fortalecer la actuación que antes se aislaba. Aunque representado por uno o una, el colectivo está por detrás, fuerte, forzando y reforzando las estructuras.
«Ocupar ese espacio es imprimir una nueva mirada. Una mirada trans, una mirada periférica, una mirada negra es una nueva forma de ver el mundo. Yo no descreo de la política, yo descreo de esa política que tiene esa mirada del hombre blanco, heteronormativo. Esa política fracasó».
Duda, Belo Horizonte
«Nosotros no estamos hablando solo de representación, estamos hablando de cuerpos que de forma secular son excluidos de esos espacios, y luego eliminados».
Vanessa, Belo Horizonte
Daniella Monteiro
El contacto con la política – y con todo ese lenguaje complicado – sucedió de hecho en la facultad, cuando ella comenzó el curso de Ciencias Sociales en la UERJ y se involucró en el movimiento estudiantil. «¿Usted entiende lo que parlamentarios, ministros, jueces están diciendo?¿Y los investigadores de las universidades?» Hoy, Daniella actúa para transponer el lenguaje de las calles a los espacios de poder y busca garantizar derechos a los cuales ella tuvo acceso pero que otras mujeres y jóvenes negros de favelas continúan sin tener. Por eso, pretende candidatearse para diputada estadual en las elecciones de este año. «No podemos retroceder. Estamos en marcha, avanzando un paso de cada vez».
Rede Umunna
La Red Umunna está formada por mujeres negras que buscan y promueven la presencia de mujeres negras en la política institucional. El trabajo de la Umunna involucra la formación política para mujeres negras, reposicionamiento de temas en la agenda pública e investigaciones centradas en datos. En este año electoral, Umunna realiza la campaña #MulheresNegrasDecidem con el objetivo de cualificar el debate de la baja representación de las mujeres negras en la política de Brasil.
Impedimento estrutural econômico
Los líderes que emergen de ese campo cuestionan un punto fundamental: militancia es un privilegio de pocos y las demandas urgentes de la vida y de la sostenibilidad económica no permiten entrar en el juego político.
«El desafío es el reconocimiento por algunos partidos de que para aumentar el cuadro de mujeres negras en la política es necesario algo más que el aumento de candidaturas, precisamos pensar, de manera prioritaria, en el financiamiento».
Juliana, Rio de Janeiro
«Yo acepté porque nosotros también tenemos que disputar símbolos. La palabra Senado es simbólica, porque Senado significa señor, una persona travesti tiene que disputar ese espacio, para resignificar ese espacio, y es un cargo que históricamente está hecho para señores más viejos. La edad mínima para concurrir al Senado es de 35 años, entonces es un cargo que no es para personas travestis, porque la expectativa de vida de una travesti es de 35 años».
Duda, Belo Horizonte
Ausência no poder judiciário
La ausencia de las periferias en cargos en la justicia brasileña crea una laguna de referencias. Jueces y juezas negros y/o que comprenden la realidad periférica son excepciones, y no dan indicios de revelar los diferentes contextos de la falta de acceso a los derechos constitucionales para crear parámetros intersectoriales en el juicio.
«El último lugar que usted puede alcanzar en la justicia en el poder judicial brasileño, es el último lugar. Son mujeres y hombres blancos juzgando a mujeres y hombres negros. Mujeres y hombres blancos que siempre tuvieron una condición material confortable, juzgando a mujeres y hombres negros que se despiertan a las 5 de la mañana, a las 4:30 de la mañana para trabajar todo el día, llegar a su casa 8, 9 horas de la noche para ganar un salario y medio, un salario, y con la reforma laboral hoy en día puede ser hasta menos. Y ahí, ¿cuál es la imparcialidad si usted no considera, cuando usted analiza un caso, que usted no está tratando de personas en iguales condiciones? Es una carrera absolutamente desigual».
Nana, Belo Horizonte
Marcelo Rocha
Marcelo Rocha tiene 20 años y ya entiende muy bien el valor de la participación ciudadana como herramienta de transformación real de la sociedad. Él forma parte del movimiento secundarista, integrando también movimientos de lucha por la educación y por el pueblo negro.
El estatus de fragmentación del campo ideológico de la izquierda pasó a ser provocado y ocupado constantemente por esos líderes, ya que la izquierda históricamente pauta más las demandas de las periferias si se compara al campo de la derecha tradicional. Los nuevos líderes políticos que se construyen a partir de las periferias no quieren negociar con esos símbolos sobrepasados de poder, como empresarios y políticos de larga data. Las periferias demandan una renovación urgente y, ahora, garantizando su representatividad de forma innegociable.
«Y la izquierda, si ella quisiera ser izquierda bien de verdad, tendrá que ir a enfrentar a los ricos y no para conciliar con ellos, a nuestro modo de ver. Ese es el papel. Partido de verdad de izquierda tiene que ser para enfrentar a los ricos. Si él concilia, los ricos van a cooptar, es lo que sucedió históricamente».
Leonardo, Belo Horizonte
«En la izquierda, fuimos extremadamente perversos con nosotros mismos, por eso es que yo creo que hoy, el movimiento social, tiene que invertir en la formación de cuadros. Para en el futuro no tener esa laguna, ¿sabes?¿Quién es que habla por nosotros?»
Celinha, Belo Horizonte
Max Maciel
Max Maciel
Cerca del poder, lejos de las tomas de decisiones. Pero no por mucho tiempo.
Max Maciel tiene 35 años y vive en Ceilândia, ciudad satélite de Brasilia, la capital federal. Emprendedor social, pedagogo por formación con especialización en gestión de políticas públicas en género y raza, él coordina la Red Urbana de Acciones Socioculturales (RUAS). Es en ese lugar, en un escenario de desigualdad que la capital federal propicia, que él milita desde hace 17 años por cambios. Candidato a diputado distrital en 2018.
Pretas em Movimento
¿Dónde están los negros y las negras?¿Y cuáles espacios ocupan?
El hecho es que, cuanto más subalterna la función, más negros la ejercen. Y cuanto más elevada, más blancos la ocupan. A partir de esa inquietud, un grupo de militantes negros de Belo Horizonte dio inicio en 2015 a la creación del Partido Negro en Movimiento para disputar espacios institucionales. La propuesta fue dejada de lado al notar que el camino más viable es fortalecer candidaturas negras.
Así, el partido se transforma en las Negras en Movimiento, un colectivo que actúa en la identificación y fortalecimiento de sujetos políticos negros dispuestos a ocupar espacios de poder – de consejos a legislaturas. «Nosotros estamos siempre en la base, siempre construyendo, siempre movilizando, siempre articulando, nosotros estamos siempre en ese movimiento, pero nunca llegamos a ocupar esos espacios», dicen los integrantes.
Hoy, el colectivo tiene representantes en el Consejo Municipal de Cultura y en el Consejo Estadual de Cultura, en universidades y gabinetes de concejales de la capital mineira. Es apenas el comienzo para revertir el escenario de opresión en Brasil.
Frente Autônoma LGBTQ de BH
Después de décadas escondido, el Carnaval de Rua de Belo Horizonte resurge con fuerza en los años 2000, trayendo un debate sobre el derecho a la ciudad y a la ocupación del espacio público. Y junto a él, diversos movimientos identitarios, como de negros, mujeres y la población LGBTQ. En otros espacios como las universidades, esos debates también se amplían.
Una serie de iniciativas surge a partir de ese proceso. Entre la población LGBTQ, ella está reunida en un frente con el objetivo de potenciar el discurso y ampliar su efectividad, sea con presencia en consejos municipales y estaduales, sea formando parte de mandatos en el legislativo. «Cuando usted reconoce su historia y la historia de los que están a su lado, usted es capaz de proponer», dicen integrantes del Frente Autónomo LGBTQ en la ciudad.
La ocupación de poder es riesgo
ATENTADO POLÍTICO
La ocupación de ese espacio político institucional trae dos realidades y consecuencias que ponen a esos líderes en un lugar de alto riesgo de vida. Si por un lado ese poder es capaz de informar, denunciar, pautar y cuestionar el statu-quo, trayendo un carácter combativo de denuncia y demanda de actitudes inmediatas, por el otro lado expone esa representatividad y la pone en peligro real, por medio de amenazas, presiones políticas y violencia.
«Nosotros, estamos en fase de planificación, pero queremos pautar las elecciones, algunos temas a partir de nuestros principios que rompen con varias cuestiones, con varios vicios problemáticos de la institucionalidad. Proponer debates públicos, una carta que sea firmada para comprometerse con el apoyo a candidaturas con participación en el diseño de otra política, de una política que no esté viciada. No tenemos interés en cambiar de cargo, ocupar un cargo y mandar. Estamos interesados en transformar el modo de hacer política, en intentar hacer efectiva de hecho una democracia para parte de una representación que no sea una representación exclusiva. Nadie quiere tener a un negro en el gabinete o a una negra en la Cámara Municipal. Si la mayoría son mujeres y negras en la sociedad, creemos que un gabinete que tiene 20 personas tiene que tener una mayoría de mujeres negras allí dentro. Eso es algo que nosotros proponemos y eso no es negociable, son tipos de concesión que nosotros no vamos a hacer. Solo candidatos negros, ¿ok?¿Y ustedes están dispuestos a firmar eso con nosotros?»
Evandro, Belo Horizonte
«Este año es de lejos uno de los más difíciles, ya hemos visto de todo. Nosotros no logramos avanzar en nada de lo que nosotros propusimos hacer con relación a los derechos humanos y garantía de derechos».
Thainã, Rio de Janeiro
Marielle Franco representa el fin, el medio y el comienzo de este estudio. Fue por ocupar el poder con su cuerpo político que Marielle perdió el derecho a la existencia.
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Su lucha representa el derecho a la existencia, a la memoria, a la educación, a la cultura, a la economía, al bien vivir, a la participación política y a la ocupación del poder. Su lucha representa la garantía a la Constitución.
«La persecución política existe no solo aquí, sino también en otros estados, al menos es el caso de Marielle, ¿no es así? Todo el mundo sabe que eso fue por la política, un asesinato, porque ella apoyaba a las minorías. Muchas, no solo ella, como, por ejemplo, líderes indígenas que apoyan otras causas, son también asesinados».
Fetxá, Brasília
Un lema. Yo soy porque nosotros somos.
Un miedo. ¿Un miedo? Caer.
Un sueño. Mantenerse firme.
Un desafío. Mantenerse equilibrada, para no caer y mantenerse firme.
La política. Responsabilidad. Una de las mayores responsabilidades de mi vida hoy.
América Latina. Visión en perspectiva.
La innovación política. Formas de viabilizar este nuevo siglo. El siglo XXI.
O Brasil. Desigual, pero importante acogedor.
No creo que sea eso, pero me viene la desigualdad.
Una desigualdad en las diferencias.
Marielle Franco, agosto de 2017.